Hace unas semanas tuvimos oportunidad de acudir y participar en Donostia-San Sebastián en la XIII Jornada de Sostenibilidad organizada por el BCC Innovation, centro tecnológico en gastronomía de Basque Culinary Center en colaboración con la Diputación foral de Gipuzkoa y la Fundación Biodiversidad.
En esta entrada hacemos referencia a cuatro iniciativas en materia de sostenibilidad y economía circular en el ámbito alimentario que fueron presentadas en una mesa redonda muy interesante.
Joan Capilla, presentó el Hotel Restaurante L’Algadir, situado en pleno parque natural del Delta del Ebro. Ejemplo muy relevante de gastronomía circular y sentido común, desde sus origenes en este establecimiento se trabaja con un radical compromiso por la sostenibilidad ambiental, social y económica. Este año ha recibido una Estrella Verde Michelin. Muy impresionante todo lo que hacen…
Javier Jiménez, vino de Canarias para presentar Effiwaste, una empresa de reciente creación que ha desarrolado un software de uso de datos para la optimización de menús y reducción de desperdicio en canal HORECA. Llevan poco tiempo pero parece que les está yendo muy bien.
Ganix Berazadi presentóEkolio (Zarautz). Una empresa muy interesante que se dedica a la recogida y acopio de aceites de fritura de restaurantes. Tras su acondicionamiento (filtración y deshidratación) la empresa vende en cisternas estos aceites a industrias de biodiesel. Muy interesante porque la empresa viene a solucionar la problemática que tienen estas industrias a la hora de recibir un suministro adecuado y regular de este tipo de aceites, que se originan de forma muy atomizada, y que presentan problemas de contaminación con sólidos y agua.
Ana Marcos vino desde Gijón para presentar Panduru, una pequeña empresa de repostería circular. Ana y Elena Fernández, partiendo de pan excedentario de panaderías artesanales, el pan que se elabora cada día pero que por cualquier razón no sale a la venta, elaboran productos diversos como galletas, pastas, bizcochos, rocas y tabletas de chocolate… Los venden en su obrador, así como en ferias y tiendas de proximidad de diferentes localidades de Asturias. También ofrecen servicios de catering en eventos, así como organizan y participan en talleres y jornadas sobre desperdicio alimentario, economía circular, sostenibilidad, economía social y emprendimiento.
En esta entrada nos hacemos eco de un diagnóstico realizado en 2023 por el Consorcio EDER, en la Ribera de Navarra, titulado «Estudio sobre soluciones técnicas para la gestión y valorización de residuo agroalimentario en la Ribera De Navarra». Es un trabajo centrado en el sector industrial de transformados vegetales, en el que se hace una caracterización de la generación y gestión de restos vegetales (subproductos, residuos, etc.).
El tamaño muestral es muy relevante, puesto que analizan datos proporcionados por 35 empresas de la Ribera, Ribera Alta y Ribera Estellesa de Navarra, muy representativas del sector, incluyendo mayoritariamente conserveras, pero también empresas del sector de congelados, que procesa volúmenes muy elevados en un número reducido de plantas de procesado, así como empresas de primera y cuarta gama.
¿Cuales son las principales materias primas procesadas? ¿Y las mermas?
Materias primas y mermas. Cantidades anuales totales y distribución por categorías de vegetales. Elaboración propia a partir del documento del Consorcio EDER.
Tal y como se puede ver en la figura anterior, las 35 empresas analizadas procesan anualmente una cantidad muy elevada de materias primas, cercana a 800.000 toneladas, que dan lugar a algo más de 570.000 t de productos finales. En este procesado se generan unas mermas o restos del orden de 220.000 toneladas. Suponen, en promedio el 27,5 % de las materias primas, pero este porcentaje varía ampliamente de unas categorías a otras. Así, ronda el 70 % en el caso de las alcachofas, cardo, maíz; el 50 % para espárragos, pimientos, borraja; el 30-35 % para la cebolla, brócoli, acelga, judías verdes, lechugas; el 11-19 % para puerro, patata, guisantes; y del 10 % o menos para tomate, espinacas, coliflor, legumbres, etc.
En cuanto a las materias primas, las 10 primeras categorías de hortalizas suponen el 90 % del total, destacando el tomate, pimiento, brócoli, que suman conjuntamente casi el 50 % del total. En cuanto a las mermas, destaca mucho el pimiento (una cuarta parte de todas las mermas), seguido del brócoli y maiz. Las tres suman el 56 % de todas las mermas. El tomate, al tener un rendimiento en el procesado del 95-90 %, supone solo el 8 % de los restos totales.
Las cantidades globales de materias primas, productos y mermas de este estudio son muchísimo más elevadas que las estimadas por nosotros mismos en un trabajo realizado hace unos años sobre caracterización de residuos y subproductos de la industria alimentaria navarra, que aparece descrito en una entrada anterior. En aquel trabajo subestimábamos mucho la cantidad de subproductos generados en la transformación de vegetales, dado que no teníamos datos fiables de la cantidad de materias primas absorbidas por las empresas del sector.
¿Qué se hace con las mermas? ¿Subproductos? ¿Residuos?
Como se puede ver en la figura siguiente, en estudio del consorcio EDER se analiza el destino de las mermas, y se concluye que tienen un aprovechamiento como subproductos muy elevado, fundamentalmente para alimentación animal(92 %). En este aspecto sí hay coincidencia con las consideraciones que haciamos en nuestro propio trabajo, en el que señalábamos que el destino de los restos vegetales era casi en su totalidad la alimentación animal, en su mayor parte de forma directa (a través de acuerdos o contratos entre explotaciones ganaderas y las industrias), o previa transformación para la obtención de piensos, en plantas como la de la empresa TRASA, a la cual dedicamos en su día otra entrada.
De acuerdo a los resultados obtenidos en el estudio, la circularidad de la industria de vegetales sería muy elevada, puesto que solo un 4 % de los restos orgánicos generados pasaría a manos de gestores de residuos. Su destino sería en un 60 % procesos de tratamiento biológico (biometanización y compostaje), mientras que un 31 % iría a vertedero.
¿Cuándo se producen las mermas?
En el estudio se aportan datos muy interesantes sobre la evolución a lo largo del año de la actividad de las industrias y la generación de mermas. Se observan unas variaciones estacionales muy marcadas. La mayor actividad se da en el tercer trimestre del año, en el que se concentran nada menos que el 60 % de las mermas totales, mientras que en el primer trimestre la actividad se reduce al mínimo, salvo para aquellas materias primas de las que hay disponibilidad a lo largo de todo el año, como las legumbres secas.
La estacionalidad de la producción junto a las características de los restos orgánicos generados (alta humedad) condicionan en gran medida sus posibilidades de aprovechamiento y valorización, más allá de la alimentación animal.
La anterior vez fue antes de la pandemia. En una entrada anterior describimos con bastante detalle los muchos procesos de muy diferente naturaleza (procesos térmicos de secado, de incineración, procesos de destilación y rectificación, de extracción sólido-líquido, procesos biológicos anaerobios y aerobios, etc.) que se desarrollan en esta empresa.
Como se explicaba en dicha entrada y se puede ver también en su página web, Agralco es una auténtica biorrefinería donde se integran todos esos procesos logrando una valorización prácticamente completa de unas 70.000 toneladas de subproductos vinícolas generadas en alrededor de 450 bodegas de Navarra, Álava, Rioja y Castilla y León; dando lugar a muchos productos comercializables y/o aprovechables desde el punto de vista energético: etanol de diferentes purezas y propiedades, tartratos, enocianina (colorante alimentario), aceite de semilla de uva, biomasa (harina de semilla desengrasada), con una depuración de las aguas residuales generadas en sus procesos permite generar biogás (utilizado internamente en las instalaciones) y unos fangos deshidratados que se emplean como enmiendas orgánicas en viñedos.
Vista de las «montañas» de orujos desde la planta de refinado de aceites vegetales. Al fondo, la chimenea de filtrado y extracción de los humos limpios generados en la caldera de combustión de biomasa
Vista desde el exterior de la planta de refinado de AGRALCO
En esta breve entrada destacamos la mayor novedad que se ha producido estos años en la empresa, que es el diseño, instalación y puesta en marcha de una planta de refinado de aceites vegetales, que les ha permitido ir un paso más allá con respecto a la situación anterior. Hasta hace unos años la empresa obtenía aceite crudo de semillas, y ahora es capaz de someter dicho aceite a un complejo proceso de refinado, que incluye varias etapas: neutralización o descerado, decoloración o blanqueo, winterización o pulido y desodorización. El resultado final es un aceite de semilla de uva purificado, limpio, ligeramente amarillento, prácticamente inodoro e insípido, que tiene su principal nicho de mercado los países asiáticos para uso alimentario, tanto a nivel culinario como industrial. También tiene mucho uso en cosmética.
De izquierda a derecha: semillas deshidratadas (antes de molienda y pelletizado), aceite crudo, harina de pepita desengrasada (biomasa)
Aspecto de los pellets obtenidos con las semillas deshidratadas y molidas. Estos pellets se someten a extracción con hexano para la obtención del aceite crudo. Se puede apreciar su brillo debido al aceite que contienen (alrededor del 15 %).
Muestra de aceite refinado de semilla de uva. Al fondo, parte de las instalaciones de la planta de refinado
Los pasados días 15 y 16 de noviembre Eatex Food Innovation Hub organizó las primeras jornadas Eatex Future days con el título «Riqueza verde. Cómo aprovechar los residuos y los subproductos agroalimentarios para negocios eficientes y sostenibles». Durante la mañana del día 15 hubo una serie de ponencias y a la tarde y el día 16 se dinamizaron una serie de mesas de trabajo para desarrollar ideas y retos sobre la temática. En esta entrada se resumen las ponencias:
(1) Silvia García de la Torre, como directora del mismo presentó Eatex Food Innovation Hub, proyecto impulsado por el CNTA con el apoyo del Gobierno de Navarra y el Sistema Navarro de I+D+i (SINAI), financiado por la UE-NextGenerationUE.
(2) Margarita de Gregorio, coordinadora de la Plataforma Española ‘Biomasa para la Bioeconomía’ (BIOPLAT), señaló que «España es el tercer país europeo por recursos absolutos de biomasa y el séptimo en términos de consumo per cápita. Sin embargo, se encuentra a la cola en el ranking europeo por aprovechamiento de los mismos». Habló de las oportunidades que se abren para la bioeconomía en un marco de estrategias y cambios normativos a nivel europeo favorables al respecto.
Inciso. En su presentación hizo alusión al los datos recogidos en el Informe del Desperdicio Alimentario en la Industria y la Distribución en España, que dicen que «por cada kg/lt de producto acabado se producen 0,0022 kg/lt de subproducto y 0,0004 kg/lt de residuo». Estas cifras son a mi juicio totalmente erróneas y subestiman la realidad de una forma que raya lo absurdo, como ya argumentamos en una entrada previa relativa a dicho informe.
(3) Inés Echeverría Goñi, Directora del área de I+D de CNTA, en su ponencia «Cómo elegir la mejor vía de valorización. Tecnologías, estrategias y claves para la toma de decisiones«, complementó la ponencia anterior, haciendo un recorrido por los datos disponibles en la UE sobre flujos de biomasa, residuos alimentarios en la UE, distribución de industrias bio-basadas y biorrefinerías (visualizando una gran diferencia entre los países del sur y los del centro-norte).
A continuación hizo alusión a las opciones de valorización de los residuos alimentarios para transformarlos en productos de valor añadido, de la metodología y tecnologías aplicables al respecto, y de los factores a considerar para poner en marcha iniciativas de este tipo. Factores de carácter tanto técnico como económico que tienen que ver con el propio residuo (tipo, características, lugar de producción, disponibilidad, estabilidad, etc.), con el producto final a obtener (requerimientos, rendimiento, posibilidades de inserción en el mercado, etc.) y con el proceso de valorización (tecnologías disponibles, impacto ambiental, costes, etc.), y con aspectos de tipo transversal como son los requisitos regulatorios y legales, la viabilidad económica, la capacidad de inversión, etc.
Presentó algunos ejemplos de éxito como modelos de negocio:
Evergrain, creada por el grupo cervecero belga AB InBev, que transforma su bagazo en ingrediente proteico EverPro (85 % de proteina) para vender como ingrediente a industria alimentaria.
Kern Tec, empresa austriaca, que a partir de huesos de fruta desechados, desarrolla ingredientes innovadores y sostenibles y soluciones listas para usar en la industria alimentaria, desde alternativas a la leche hasta cremas de frutos secos para untar.
La empresa española NATAC, dedicada al desarrollo de «nuevos ingredientes innovadores obtenidos a partir de plantas de origen mediterráneo, con especial dedicación al olivo, uva/vid, cítricos, azafrán, granada y alcachofa».
Desde Murcia, Agrosingularity, dedicada a producir ingredientes secos en polvo a partir de materias primas y subproductos vegetales (cáscara de granada, manzana, puerro, tallo de brócoli, acelga, tomate, calabaza, espinaca, etc.).
(4) Paloma Iturmendi Küstner, presentó el grupo Kimitec en calidad de Directora de Desarrollo de Negocio. Esta empresa está vinculada al Centro de Investigación MAAVi, en Almería. Kimitec busca aprovechar «las sinergias existentes entre las 4 áreas naturales: botánica, microbiología, microalgas y química verde para ofrecer una alternativa a la aplicación de química de síntesis en los cultivos».
(5) David Alfonso Solar, profesor del Dpto. de Termodinámica Aplicada de la Universidad Politécnica de Valencia e investigador en el Instituto de Ingeniería Energética, adelantó los resultados del proyecto de «Mapeo del potencial accesible de biomasa en España 2023». El potencial accesible «es la cantidad de biomasa que puede ser objeto de gestión (recogida, transporte, almacenamiento y valorización). Se descarta, total o parcialmente, aquella biomasa residual que resulta casi imposible su recogida y transporte, o que, por motivos legales u otros, no se pueden valorizar». La contabilización se hace sin considerar si las distintas fuentes de biomasa se están aprovechando o no actualmente. El mapeo incluye una clasificación de la biomasa en tipos, categorías, agrupaciones y subcategorías. Los tipos incluyen los residuos de la silvicultura y la agricultura, los ganaderos, los alimentarios de origen animal (mataderos, industrias láctea y pesquera), los de origen vegetal (subproductos de transformación, residuos hortofrutícolas no conformes, los lodos de depuradora urbana y agroalimentaria, los residuos de parques y jardines, y los residuos municipales. La cuantificación es anual en forma de distintos índices, en toneladas de materia húmeda y seca. Los resultados se presentan de distintas formas, y se establecen fichas provinciales con datos por 40 agrupaciones de subcategorías. En el caso de Valencia la caracterización se llega a hacer a nivel comarcal. Se prevé que a final de este año el mapeo estará completo y se hará público.
Aportan algunos datos, como que los residuos de agricultura y silvicultura son claramente los más importantes, 32 millones de t al año (el 59 % del total inventariado), siendo la paja de cereal la agrupación más importante. A nivel de residuos de la industria alimentaria los valores son de una magnitud menor pero importante. Se indica que los subproductos/residuos de transformados vegetales suponen un total de 2,81 millones de t/año, indicando que es un grupo muy amplio y diverso (frutos no conformes, subproductos de producción de zumos y conservas, sector aceite de oliva, producción vino, cerveza, azúcar,….) y que el alperujo es el material más abundante con 1,6 millones de t/año. En los animales el total es de 0,87 millones de t al año, del cual 0,49 corresponderían a los generados en los mataderos.
(6) Desde el grupo Mahou, su responsable de Emprendimiento, Rubén González, presentó BarLab Ventures, una plataforma de innovación abierta destinada a apoyar proyectos para la cadena de valor de la compañía y describió los avances de la empresa en relación al aprovechamientos de sus subproductos y residuos. Por ejemplo, su colaboración con Bioento, empresa que basa su actividad en la eliminación de subproductos y residuos orgánicos utilizando larvas de insecto para obtención de productos de alimentación animal y fertilizantes. Con Sanygram en la exploración del uso de la extrusión húmeda del bagazo para la obtención de análogos de carne de ternera. Y también señaló que están trabajando en la valorización del bagazo a través de su secado y molienda para la obtención de harinas para su empleo como ingrediente alimentario en panificación.
Curiosamente hace ya unos años, en el curso 2016-2017, un grupo de estudiantes de nuestra universidad realizó un conjunto de Trabajos Fin de Grado bajo nuestra dirección, que versaban sobre la utilización del bagazo y las lías de fermentación de la cerveza en la elaboración de pan. Integraron sus trabajos bajo un proyecto de innovación con el que obtuvieron el segundo premio en el VIII concurso nacional Ecotrophelia, organizado por la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB). En este video se explica brevemente aquel proyecto:
En varias entradas previas se ha hecho referencia y se ha descrito la actividad de dos empresas navarras dedicadas a la valorización de subproductos alimentarios con una larga trayectoria ambas:
AGRALCO, la antigua «alcoholera de Estella», que realiza una completa valorización de alrededor de 70.000 t orujos y lías, procedentes de la práctica totalidad de las bodegas de Navarra y La Rioja, obteniendo entre otras cosas alcohol, colorante (enocianina) y aceite de semilla de uva (ver entrada previa).
TRASA, situada en Milagro, que recibe alrededor de 10.000-12.000 t de subproductos vegetales de conserveras y congeladoras del valle del Ebro, con los que produce unas 18.000 t de productos para alimentación animal, a través de la realización de mezclas y ensilado (ver entrada previa).
En esta entrada hacemos referencia a otras empresas de reciente aparición que están desarrollando procesos de innovación de diferente tipo para la obtención a partir de subproductos de componentes e ingredientes destinados a alimentación humana y a otros usos:
Ingredalia. Empresa vinculada a Trasa, surgida como «startup» en 2017. Prevé construir en 2022 una planta de proceso en Milagro, para la revalorización de subproductos del brócoli, que es el segundo producto hortícola más producido en Navarra actualmente, tras el tomate. El compuesto activo de interés es el sulforafano, con propiedades anticancerígenas, antiinflamatorias e inmunológicas. Han desarrollado dos productos: Sulforaphan-Smart «se basa en la combinación de glucosinolatos y la enzima mirosinasa, protegidos mediante un sistema de encapsulación bicapa que garantiza la producción del compuesto activo en el órgano diana donde es asimilado»; y Brasphenol «que consiste en un extracto vegetal rico en polifenoles (….), con actividad antioxidante» y que «se basa en la recuperación de los polifenoles presentes en subproductos derivados del brócoli u otros vegetales». Ver noticia en NavarraCapital.
AgroSingularity. Empresa dedicada a producir ingredientes secos en polvo a partir de materias primas y subproductos vegetales (cáscara de granada, manzana, puerro, tallo de brócoli, acelga, tomate, calabaza, espinaca, etc.). La empresa se creó en Murcia y se va a instalar próximamente también en Navarra. Ver noticia en ABC.
Eggnovo. Empresa ubicada en Villatuerta que dese hace varios años productos que contienen calcio, colágeno, elastina y glucosaminoglicanos naturales obtenidos a partir de subproductos del huevo (membrana y cáscara). Los productos que comercializa son Ovomet, con componentes de la membrana para el tratamiento de disfunciones articulares, Ovocet, que utiliza el carbonato cálcico de la cáscara para problemas de osteoporosis, Ovoderm, destinado a reforzar el sistema de pelo, piel y uñas, y Ovopet, orientado a la salud articular para animales de compañía, especialmente perros.
La valorización de subproductos alimentarios no requiere necesariamente la aplicación de procesos de transformación complejos o tecnologías sofisticadas. El mejor proceso de valorización es aquel que permite un aprovechamiento lo más completo posible del subproducto aplicando tecnologías existentes, contrastadas y asumibles como inversión.
En el proceso de elaboración del queso por cada 100 litros de leche se obtienen aproximadamente 10 kg de queso. El 90 % de la materia prima es el lactosuero, un subproducto líquido rico en proteínas solubles y en lactosa. El lactosuero es uno de los flujos de residuos/subproductos identificados como más importantes en el contexto europeo, en el proyecto REFRESH (ver entrada previa). A partir del lactosuero es posible obtener, mediante diferentes tecnologías de separación por membranas y secado por atomización, productos de diversa naturaleza: lactosuero en polvo, concentrados y asilados proteicos, etc. (ver ejemplos en entrada previa).
En las queserías pequeñas, las prácticas habituales para gestionar el suero suelen ser la alimentación de animales o su extensión en los campos. Una quesería navarra, Axuribeltz, ha decidido hacer algo distinto: producir y comercializar productos derivados del suero, como requesón, un producto también tradicional, y bebidas fermentadas, productos más innovadores. En el siguiente enlace a la publicación on-line NavarraCapital se puede leer más sobre el proyecto: Axuribeltz lanzará bebidas ecológicas con suero de queso de oveja.