En varias entradas previas se ha hecho referencia y se ha descrito la actividad de dos empresas navarras dedicadas a la valorización de subproductos alimentarios con una larga trayectoria ambas:
AGRALCO, la antigua «alcoholera de Estella», que realiza una completa valorización de alrededor de 70.000 t orujos y lías, procedentes de la práctica totalidad de las bodegas de Navarra y La Rioja, obteniendo entre otras cosas alcohol, colorante (enocianina) y aceite de semilla de uva (ver entrada previa).
TRASA, situada en Milagro, que recibe alrededor de 10.000-12.000 t de subproductos vegetales de conserveras y congeladoras del valle del Ebro, con los que produce unas 18.000 t de productos para alimentación animal, a través de la realización de mezclas y ensilado (ver entrada previa).
En esta entrada hacemos referencia a otras empresas de reciente aparición que están desarrollando procesos de innovación de diferente tipo para la obtención a partir de subproductos de componentes e ingredientes destinados a alimentación humana y a otros usos:
Ingredalia. Empresa vinculada a Trasa, surgida como «startup» en 2017. Prevé construir en 2022 una planta de proceso en Milagro, para la revalorización de subproductos del brócoli, que es el segundo producto hortícola más producido en Navarra actualmente, tras el tomate. El compuesto activo de interés es el sulforafano, con propiedades anticancerígenas, antiinflamatorias e inmunológicas. Han desarrollado dos productos: Sulforaphan-Smart «se basa en la combinación de glucosinolatos y la enzima mirosinasa, protegidos mediante un sistema de encapsulación bicapa que garantiza la producción del compuesto activo en el órgano diana donde es asimilado»; y Brasphenol «que consiste en un extracto vegetal rico en polifenoles (….), con actividad antioxidante» y que «se basa en la recuperación de los polifenoles presentes en subproductos derivados del brócoli u otros vegetales». Ver noticia en NavarraCapital.
AgroSingularity. Empresa dedicada a producir ingredientes secos en polvo a partir de materias primas y subproductos vegetales (cáscara de granada, manzana, puerro, tallo de brócoli, acelga, tomate, calabaza, espinaca, etc.). La empresa se creó en Murcia y se va a instalar próximamente también en Navarra. Ver noticia en ABC.
Eggnovo. Empresa ubicada en Villatuerta que dese hace varios años productos que contienen calcio, colágeno, elastina y glucosaminoglicanos naturales obtenidos a partir de subproductos del huevo (membrana y cáscara). Los productos que comercializa son Ovomet, con componentes de la membrana para el tratamiento de disfunciones articulares, Ovocet, que utiliza el carbonato cálcico de la cáscara para problemas de osteoporosis, Ovoderm, destinado a reforzar el sistema de pelo, piel y uñas, y Ovopet, orientado a la salud articular para animales de compañía, especialmente perros.
La valorización de subproductos alimentarios no requiere necesariamente la aplicación de procesos de transformación complejos o tecnologías sofisticadas. El mejor proceso de valorización es aquel que permite un aprovechamiento lo más completo posible del subproducto aplicando tecnologías existentes, contrastadas y asumibles como inversión.
En el proceso de elaboración del queso por cada 100 litros de leche se obtienen aproximadamente 10 kg de queso. El 90 % de la materia prima es el lactosuero, un subproducto líquido rico en proteínas solubles y en lactosa. El lactosuero es uno de los flujos de residuos/subproductos identificados como más importantes en el contexto europeo, en el proyecto REFRESH (ver entrada previa). A partir del lactosuero es posible obtener, mediante diferentes tecnologías de separación por membranas y secado por atomización, productos de diversa naturaleza: lactosuero en polvo, concentrados y asilados proteicos, etc. (ver ejemplos en entrada previa).
En las queserías pequeñas, las prácticas habituales para gestionar el suero suelen ser la alimentación de animales o su extensión en los campos. Una quesería navarra, Axuribeltz, ha decidido hacer algo distinto: producir y comercializar productos derivados del suero, como requesón, un producto también tradicional, y bebidas fermentadas, productos más innovadores. En el siguiente enlace a la publicación on-line NavarraCapital se puede leer más sobre el proyecto: Axuribeltz lanzará bebidas ecológicas con suero de queso de oveja.
En esta entrada resumimos un trabajo que hemos realizado para tratar de caracterizar la generación de residuos y subproductos alimentarios durante los años 2017, 218 y 2019 en la industria alimentaria de Navarra, en su conjunto y en sus principales sectores (transformación de vegetales, sacrificio de animales, lácteo, vinícola, malta, producción de aceite de oliva, etc.).
La metodología empleada se resume en la figura 1, y fue en buena medida la recomendada por la Unión Europea a través de la Decisión Delegada (UE) 2019/1597 (ver entrada previa). Por un lado, se emplearon medidas directas sobre residuos alimentarios aportadas en forma de hojas de cálculo por parte de la Oficina de Prevención de Residuos y de Impulso de la Economía Circular (OPREC) del Gobierno de Navarra. Además, para contextualizar y contrastar dichos datos, se analizaron determinados inventarios de residuos publicados por el Gobierno de Navarra.
Por otra parte, se calculó de forma estimativa el conjunto de residuos más subproductos (R+Sb) generado en cada sector industrial a través de ecuaciones de balance de masa basadas en datos estadísticos sobre producción de materias primas y/o productos, y en coeficientes de generación de R+Sb seleccionados tras una revisión bibliográfica. Conocidas las cantidades de residuos y de R+Sb se pudo estimar que parte de los últimos debían ser considerados subproductos.
Figura 1. Esquema de la metodología seguida en el estudio
Adicionalmente, se trató de determinar qué destino tuvieron los diferentes materiales, a qué sistemas de tratamiento fueron sometidos los residuos, y cuáles fueron las formas de aprovechamiento y valorización de los subproductos. Esto último fue más difícil, al menos en términos cuantitativos.
En la figura 2 se presenta una síntesis de los resultados, del balance de materias primas, productos, subproductos y residuos obtenido tras los cálculos y análisis realizados. En base a los datos disponibles, los sectores estudiados y las asunciones realizadas el balance contempla cómo a partir de cerca de 900.000 t de materias primas de origen vegetal y animal, la industria alimentaria daría lugar a unas 620.000 t de productos finales. Más de una tercera parte (250.000 t) serían conservas y congelados vegetales, aunque la cifra real con toda seguridad será mucho mayor a la calculada. Según la Asociación Española de Fabricantes de Vegetales Congelados (Asevec), solo en las seis plantas congeladoras existentes en Navarra se producen ya más de 250.000 t de productos congelados. Por esta razón, lo primero a señalar es que las cantidades calculadas de materias primas y productos y, por lo tanto, de residuos y subproductos, subestiman las cantidades reales.
En cualquier caso, la cifra global obtenida de R+Sb es muy importante, en torno a 230.000 t anuales. La mayor parte surge del procesamiento de materias primas de origen vegetal, en particular del sector de transformación de hortalizas que generaría más de 100.000 t de R+Sb al año.
Inciso: En el informe se señala que esta estimación subestima la cifra real, posiblemente muy superior, debido a que no pudimos contar con datos precisos de los volúmenes de producción de las industrias del sector, en particular de las plantas congeladoras. Estas plantas dan salida a más del 30 % de los congelados vegetales de España, y procesan materias primas provenientes no solo de Navarra sino también de otras regiones. Más abajo se insiste en esta cuestión.
Por su parte, en lo que se refiere a productos de origen animal, los R+Sb producidos en los mataderos (unas 60.000 t al año) representarían en torno al 75% de los R+Sb de origen animal, siendo el sacrificio de aves el segmento con diferencia más destacado.
Del conjunto de los R+Sb generados, se ha determinado que únicamente un 11-18 % del total adquiere la condición de residuos y es gestionado como tal (26.000-40.000 t). La biometanización es el método de tratamiento más generalizado, aplicándose a casi la mitad de los residuos de origen animal y a más del 75 % de los de origen vegetal. El compostaje se aplica en menor medida, aunque es importante también para los residuos de origen animal. La eliminación en vertedero afectaría a menos del 5 % de los residuos alimentarios, apenas nada a los de origen vegetal, ascendiendo hasta un 14 % para los de origen animal.
Figura 2. Resumen de los resultados obtenidos (valores redondeados en base a los promedios de los años 2017, 2018 y 2019)
El 82-89 % restante de los R+Sb, nada menos que unas 200.000 t, pertenecerían a la categoría de subproductos, al asumir en el trabajo que no llegan a adquirir la consideración de residuos debido a que son valorizados o aprovechados. La forma en que se concreta esta valorización es relativamente conocida, aunque la precisión de dicho conocimiento varía ampliamente en función del sector considerado.
El sector que genera más subproductos es evidentemente el de transformación de vegetales que produciría en torno a 90.000 t de subproductos, estimación mucho menor de la cifra real, por los motivos señalados antes (para corroborarlo, ver entrada posterior sobre un estudio realizado por el Consocio EDER en 2023. En este estudio sobre una muestra amplia pero no completa de las empresas de este sector, la cifra de subproductos ronda el valor de200.000 t). En cualquier caso, lo que sí parece claro es que el destino final es, casi en su totalidad, la alimentación animal, bien de forma directa (a través de acuerdos o contratos entre explotaciones ganaderas y las industrias), o previa transformación para la obtención de piensos, en plantas como la de la empresa TRASA, tal y como se describe en una entrada previa.
Figura 3. Vista de subproductos vegetales recepcionados en la empresa TRASA. Esta empresa recibe anualmente entre 10.000 y 12.000 t de subproductos de conserveras y congeladoras del Valle del Ebro.
El siguiente sector en importancia sería el de sacrificio de animales. Se ha estimado que de las 60.000 t de SANDACH generadas en los mataderos navarros, la mayor parte (entre 42.000 y 55.000 t) no serían gestionadas como residuos, y por lo tanto deben estar siendo valorizadas como subproductos, en principio para la obtención de productos derivados como harinas de carne, gelatinas, colágenos, etc., aunque no se ha podido contar con ningún dato concreto al respecto.
En otros sectores, como el quesero o el del aceite de oliva, existen también importantes incertidumbres en lo que respecta al destino de los subproductos generados, el lactosuero (17.000 t) y el alperujo (18.000 t), respectivamente. Aunque se desconoce en qué proporción, se sabe que parte de ambos se redirige también a alimentación animal.
En el sector de industrias de cereales de primera transformación (harineras, arroceras, malteras), solo se ha considerado el sector de la malta. En Navarra hay una importante planta maltera en la localidad de San Adrián, que produce unas 150.000 t de malta al año. En base a los datos disponibles y los cálculos realizados se ha estimado que la planta daría lugar a alrededor de 6.000 t de desechos (raicillas y finos de malta), de las cuales unas 1.000 se gestionarían como residuos y 5.000 como subproductos, empleados para alimentación animal.
En el trabajo no se pudo realizar una cuantificación de los R+Sb generados en el sector de las industrias de cereales de segunda transformación (panificación, galletería, bollería, pastelería, pastas alimenticias, etc.), por no contar con datos precisos sobre materias primas, productos, ni coeficientes de R+Sb. No obstante, sí se ha podido saber que una parte importante de los subproductos generados en estas industrias se derivan a empresas gestoras que los clasifican, secan y trituran para obtener «harinas de galleta» para alimentación animal. Ejemplos de estas empresas son PROMICy OLISEFI.
De todo lo anterior, resulta evidente algo ya conocido, que el destino más habitual de los subproductos industriales alimentarios es la alimentación animal, en particular cuanto se trata de subproductos de origen vegetal. En el trabajo se ha estimado que aproximadamente la mitad (51 %) de los subproductos de la industria alimentaria de Navarra se emplearían para alimentar animales, es decir, unas 100.000 t. No obstante, en base a lo que se ha señalado en párrafos anteriores, la cifra real probablemente sea mayor.
El sector que mejor se ha podido caracterizar en este trabajo es, sin duda, el vinícola, tanto en relación al volumen como al destino y formas de valorización de los subproductos generados. La casi totalidad de los orujos y lías de las bodegas navarras (20.000-27.000 t) van a parar a una única empresa (AGRALCO, situada en Estella, ver entrada previa) que puede definirse como una biorrefinería en la que son sometidos a múltiples procesos de valorización y depuración (figura 4) dando lugar a diferentes productos, como alcohol, colorante, aceite de semillas, tartratos, fangos agrícolas, además de energía térmica a través de la incineración de los residuos restantes. Es por lo tanto el sector de la industria alimentaria con el mayor grado de “circularidad” en la gestión de los flujos de materiales orgánicos generados.
Figura 4. Esquema de los productos y recursos obtenidos en AGRALCO en la valorización y depuración de subproductos vinícolas (elaborado a partir de información aportada por la empresa en mayo de 2019)
Como conclusión, el trabajo realizado ha permitido obtener una visión preliminar de la situación que, más allá de en qué medida los resultados obtenidos se acercan a la realidad, ha permitido identificar en qué aspectos habría que incidir en próximos estudios para obtener estimaciones más precisas en relación al volumen, naturaleza y origen de los distintos residuos y subproductos y, sobre todo, con respecto a su destino, a la forma en que son utilizados o valorizados.
En la conferencia final del proyecto REFRESH, en el espacio específico dedicado a la valorización de residuos/subproductos/excedentes alimentarios, se presentó la herramienta FORKLIFT(FOod side flow Recovery LIFe cycle Tool).
El objetivo de FORKLIFT es proporcionar una herramienta para los responsables políticos, investigadores, profesionales, empresas y otras partes interesadas en las posibilidades de utilización/valorización de los residuos/subproductos alimentarios para evaluar las mismas a través de un enfoque de ciclo de vida accesible, sin necesidad de realizar un análisis detallado del ciclo de vida (ACV).
En formato de hoja de cálculo, y basándose en el enfoque de ciclo de vida, esta herramienta permite hacer una evaluación del impacto ambiental (en concreto del efecto en la emisión de gases de efecto invernadero) y de los costes asociados a la forma de utilización de 6 ejemplos de subproductos/residuos del procesamiento de alimentos:
Orujo de manzana
Sangre de cerdo
Bagazo de cerveza
Orujo de tomate
Suero lácteo
Torta de prensado de semillas oleaginosas
Estos flujos de residuos se seleccionaron entre los 20 flujos principales identificados previamente en el propio proyecto REFRESH como los más importantes y con más posibilidades de valorización (ver entrada previa).
FORKLIFT ha sido construido para permitir evaluaciones para cada uno de estos flujos de residuos. En cada uno de ellos se han modelado diferentes opciones de procesamiento, desde la eliminación de residuos hasta la producción de otros productos de valor añadido. Los inventarios de procesamiento aplicados por defecto se han modelado sobre la base de procesos comercialmente demostrados siempre que ha sido posible.
Estos valores predeterminados proporcionan un punto de referencia a partir del cual los usuarios pueden modificar parámetros clave como la distancia de transporte, la energía, los rendimientos y los precios asociados para comprobar su influencia en el coste del ciclo de vida y el impacto de los gases de efecto invernadero. Los resultados se muestran junto a los productos de referencia equivalentes elaborados a partir de materias primas cuya función es, en general, similar.
Los autores explicitan claramente que FORKLIFT está sujeta a una serie de limitaciones como son:
FORKLIFT evalúa un sistema estático. Las intervenciones a gran escala sólo son razonablemente posibles para los estudios a gran escala, con menos opciones e intervenciones de mercado claras.
FORKLIFT no proporciona resultados sobre las recomendaciones políticas. Sin embargo, es útil revelando los puntos críticos de las diferentes opciones de valorización y proporciona información sobre los efectos de ciertas opciones.
FORKLIFT se basa en datos genéricos, pero los datos de inventario del proceso utilizados en los parámetros clave se han basado en casos particulares. La escala puede tener impacto, por lo que los parámetros son modificables. Debe quedar claro en cualquier caso que, a la hora de la toma de decisiones específica de empresa, FORLIFT no debe emplearse como un sustituto de los cálculos sobre la huella de carbono o de costes.
En definitiva, los autores señalan que FORKLIFT no debe utilizarse como una herramienta precisa para las decisiones de inversión ni para la comunicación externa de impactos y costes. Sin embargo, puede revelar puntos críticos de las diferentes opciones de valorización y dar indicaciones sobre los efectos de ciertas opciones. En este sentido es una herramienta de aprendizaje muy útil.
Documentos de referencia para la herramienta FORKLIFT: D.5.4 Simplified LCA & LCC of food waste valorisation D6.10 Valorisation spreadsheet tools
A continuación se presentan enlaces a los documentos de referencia para esta herramienta y a otros resultados de REFRESH vinculados a la aplicación de Life Cycle Assessment (LCA) y Life Cycle Cost (LCC) para la reducción de la generación y valorización de residuos y la mejora de la sostenibilidad del sistema agroalimentario:
REFRESH 2018: FORKLIFT – Valorisation spreadsheet tool. Enlace a la página desde la que se descargan las herramientas y también el documento anexo demostrativo (FORKLIFT Annexes: D6.10Valorisation spreadsheet tools. Learning tool for selected food side flows allowing users to indicate life cycle greenhouse gas emissions and costs)
Östergren, Karin; Scherhaufer, Silvia; De Menna, Fabio; García Herrero, Laura; Gollnow, Sebastian; Davis, Jennifer; Vittuari, Matteo (2018), D5.4 Simplified LCA & LCC of food waste valorization, Description of standardised models for the valorisation spreadsheet tool for life-cycle assessment and life-cycle costing
Liu, Gang; Xue, Li; Cao, Zhi; Prass, Neele; Gollnow, Sebastian; Davis, Jennifer; Scherhaufer, Silvia; Östergren, Karin; De Menna, Fabio; García Herrero, Laura; Vittuari, Matteo. 2019. Integration of LCC and LCA results to higher system levels. REFRESH Deliverable D5.6.
De Menna, Fabio; Davis, Jennifer; Bowman, Martin; Brenes Peralta, Laura; Bygrave, Kate; Garcia Herrero, Laura; Luyckx, Karen; McManus, William; Vittuari, Matteo; van Zanten, Hannah; Östergren, Karin. 2019. LCA & LCC of food waste case studies. Assessment of food side flow prevention and valorisation routes in selected supply chains. REFRESH Deliverable D5.5.
Hace unos días, en el marco de la asignatura Valorización de Subproductos de la Industria Alimentaria, del Máster en Tecnología y Sostenibilidad en las Industria Alimentaria de la Universidad Pública de Navarra, tuvimos la ocasión de visitar la empresaAgralco S. Coop. Ltda., situada en Estella (Navarra).
Fundada en 1962, actualmente cuenta con 48 trabajadores en plantilla y factura anualmente más de 12 millones de euros. Es una sociedad cooperativa de la que son socios 250 bodegas y que da servicio a unas 450 (el 100 % de las bodegas de Navarra, y el 80 % de las de la D.O. Rioja), encargándose del tratamiento y valorización de unas 80.000 toneladas anuales de subproductos de vinificación (60.000 t de orujos y 20.000 t de lías).
Orujos almacenados al aire libre para su procesamiento
La empresa cuenta con un sistema integrado de gestión (ISO 9001 + ISO 14001 + OHSAS 18001), y realiza un aprovechamiento prácticamente completo de los subproductos que recibe, funcionando como una auténtica biorrefinería en la que se logra la obtención de diversos productos comercializables, la valorización energética de los residuos, y todo ello tratando de minimizar los impactos medioambientales de la actividad.
(1) PRODUCTOS OBTENIDOS
Alcohol(4.800 toneladas): se obtiene por destilación a partir de las lías, excedentes de vino, y sobre todo de las piquetas obtenidas al lavar los orujos. Mediante varias columnas de rectificación (1-Destrozadora, 2-Concentradora, 3- Hidroselectora, 4-Rectificadora, 5-Desmetilizadora) se obtienen alcoholes de distintas calidades: alcohol bruto (93,5 % vol.) destinado a la obtención bioetanol, alcohol rectificado (96,5 % vol.) parte del cual es deshidratado (alcohol 99,9 %) para su uso industrial o su uso en boca (bebidas espirituosas). Cuando la materia prima es un vino de cierta calidad también obtienen aguardientes (54-77 % en alcohol).
Columnas de destilación
Detalle de la columna rectificadora
Plato de destilación con caperuzas de borboteo
Tartratos(2.500 toneladas). Las vinazas desalcoholizadas resultantes de la columna de destilación 2 se someten a varios tratamientos (acidificación, neutralización, concentración por evaporación, y secado) para obtener tartrato de calcio (50 % de ácido tartárico).
Enocianina – Orujos frescos
Acido tartárico – Tartrato cálcico
Harina de pepita desengrasada – aceite crudo – pepitas
Enocianina (200 toneladas). Este colorante rojo natural se obtiene únicamente en la época de vendimia, cuando se procesan de forma inmediata los orujos tintos frescos, por medio de un proceso de extracción (lavado con agua), y posterior concentración a vacío y desionización del extracto líquido obtenido. El resto del año no se obtiene enocianina, porque los pigmentos antociánicos de los orujos se degradan con facilidad en cuanto pasan uno o dos días de almacenamiento. El colorante obtenido, dada su alta concentración, tiene una estabilidad mucho más elevada.
Tras el lavado, los orujos que quedan son sometidos a prensado, secado y trillado para separar las pepitas(7 % de humedad, 17 % de materia grasa) y los hollejos deshidratados (14.700 toneladas, 7 % humedad).
A continuación las pepitas se muelen, se comprimen en forma de pellets y se someten a un proceso de extracción con hexano, que permite obtener un aceite bruto de pepita de uva(1.200 toneladas). Actualmente están diseñando la planta de refinado de dicho aceite. El aceite de pepitas de uva es un aceite con un perfil de ácidos grasos mayoritariamente polinsaturado (ácido linoleico, principalmente), sensorialmente muy neutro, y bastante resistente a la temperatura. Por estas razones es un aceite muy apreciado desde el punto de vista culinario en China y otras regiones de Asia. En este momento la empresa produce un aceite bruto, pero están acometiendo las obras para construir una nave de refinado para su purificiación (retirada de ceras, mucílagos, acidez libre, etc.).
Equipo de extracción del aceite
Vista del hexano cayendo sobre los pellets de pepitas de uva
(2) TRATAMIENTO DE EFLUENTES
Los procesos de valorización generan unos efluentes con una carga contaminante muy elevada. En la planta estos efluentes son sometidos a un doble proceso de depuración.
Primero un proceso de digestión anaerobia (biometanización) en el que producen biogás y un digestato líquido del cual a su vez se obtienen por espesamiento, filtración y secado unos fangos con aplicaciones agrícolas y, por otro, unos efluentes líquidos con una carga contamientante todavía elevada.
Estos efluentes líquidos sufren un segundo proceso de depuración consistente en procesos biológicos aerobios de desnitrificación para obtener finalmente unas aguas en condiciones de ser vertidas para su tratamiento en la depuradora de aguas de Estella.
Aspecto inicial de los efluentes
Uno de los dos reactores de biometanización (derecha)
Balón de biogás
Estación de desnitrificación aerobia
(3) APROVECHAMIENTO ENERGÉTICO
La planta es un ejemplo de optimización energética. Desde este punto de vista, realizan un aprovechamiento casi completo de los recursos disponibles.
En primer lugar, elbiogás generado en la digestión anaerobia se utiliza como combustible en varios motores de cogeneraciónen los que se obtiene electricidad, agua caliente y gases de combustión que son aprovechados en el secado de los tartratos de calcio. Nada menos que 3/4 partes de la electricidad consumida en la planta proceden de esta fuente. Esto supone un ahorro anual de más de 2.600.000 kWh.
Evaporador de triple efecto
Motores de cogeneración
Caldera (en la base, un camión con la carga de biomasa)
Secadero rotatorio de los orujos (derecha)
Por otro lado, los hollejos deshidratados (14.700 toneladas) y parte de la harina de pepitas desengrasadas (8.000 toneladas) se someten a combustión en una caldera de biomasa. Antes de ser evacuados, los gases de combustión generados son aprovechados para la generación de vapor, y también para el secado de los orujos.
Otro proceso de optimización es el de concentración de los efluentes en un evaporador de triple efecto. Con esto se obtiene agua caliente secundaria a la que se le da uso, y se disminuye notablemente el volumen de efluentes a depurar.
Finalmente, conviene señalar que, si bien el etanol producido no se aprovecha en la propia planta, como se ha dicho antes buena parte de él tiene un uso posterior como biocarburante (mezclas con gasolina).
En la entrada anterior se describieron las instalaciones y la actividad del Banco de Alimentos de Burdeos y la Gironda (BABG).
En las inmediaciones del BABG se sitúan las sencillas instalaciones de «Les Confitures de Dominique».
Dominique adquiere frutas procedentes del BABG que no se han distribuido entre las entidades de consumo ligadas al banco, y las transforma en mermeladas. Es un proceso muy artesanal consistente en preparar la fruta (desechar la que está en malas condiciones, lavar y cortar o triturar), mezclarla con agua y azúcar, cocerla lentamente y envasarla en botes de vidrio.
La mermelada es envasada cuando alcanza un contenido en azúcar de alrededor del 60 %. Se introduce en los botes a una temperartura mínima de 85 ºC, éstos se cierran y se colocan de inmediato boca abajo, de tal forma que el propio producto «pasteuriza» su interior, haciendo innecesario aplicar un tratamiento térmico posterior.
Exterior del local de producción (al fondo el BABG)
Dominique «cocinando»
Botes boca abajo enfriándose
Detalle de una etiqueta
El volumen de producción depende de la disponibilidad de frutas. En invierno es la época de menor actividad, mientras que en verano Dominique llega a trabajar seis días a la semana y a producir más de 500 botes diarios.
Elabora mermeladas de una gran variedad de frutas, en función de la temporada: fresa, ciruela, frutos rojos, kumkat, pera, plátano, cereza, melón, naranja, mandarína, mango, higo, etc. Tiene también elaboraciones especiales en las que combina varias frutas o las aromatiza con especias o hierbas aromáticas. Las comercializa principalmente en tiendas delicatesen, en mercados, en ferias, etc.
En su página web se puede ver el catálogo de productos.