Francia es uno de los países que más decididamente está implementado políticas en la lucha contra el desperdicio de alimentos. En febrero de 2016 vio la luz la Ley 2016-138 relativa a la lucha contra el desperdicio alimentario.
La ley establece que «la lucha contra el desperdicio de alimentos implica la responsabilización y la movilización de productores de alimentos, procesadores y distribuidores, consumidores y asociaciones».
Y señala que «las acciones para combatir el desperdicio de alimentos se implementan en el siguiente orden de prioridad»
La ley explicita que el sector de la distribución (concretamente establecimientos de venta de superficie superior a 400 metros cuadrados) está obligado a que todos los productos no vendidos que estén todavía en buen estado se valoricen de acuerdo a esta jerarquía.
Esto ha incrementado notablemente la cantidad de alimentos donados a entidades de redistribución de alimentos. En el caso del Banco de Alimentos de Burdeos, por ejemplo, actualmente un 45 % (unas 2.500 toneladas al año) de los alimentos recibidos proceden del sector de la distribución.
En España esto es menos habitual. Por ejemplo, el Banco de Alimentos de Navarra, pese a tener un sistema muy reconocido de provisión de alimentos desde la distribución minorista (a través de un convenio con la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona), recibe a través de este sistema unas 300 toneladas de productos al año, un 8 % del total recibido.
Una cuestión interesante de la jerarquía francesa es que hace referencia a la posibilidad de recuperar alimentos para consumo humano a través de su «transformación», posibilidad que no se cita (al menos no de forma explícita) en otras jerarquías publicadas, como la de WRAP de Reino Unido y la de la EPA en USA.
En entradas anteriores se han descrito iniciativas de lucha contra las pérdidas y desperdicio de alimentos en Francia, en Holanda, y en Cataluña, consistentes precisamente en la puesta en marcha de centros de transformación, fundamentalmente de frutas y hortalizas, procedentes de la distribución, del sector primario, etc.